Turismo con sentido. La nueva hospitalidad

El sector turístico tiene una relación directa con la arquitectura y el diseño. La innovación bulle en Latinoamérica, donde emerge una nueva industria turística como plataforma de ideas y diálogo creativo, más sostenible y respetuosa con los recursos y las culturas locales. En el Roca Barcelona Gallery, reunimos a algunos de los representantes líderes de esta transformación.

La arquitectura es un mensaje a la sociedad. El arquitecto mexicano Jorge Arditti destacó este principio en la jornada “Turismo, arquitectura y diseño en espacios hospitality” organizada junto a Roca en el Roca Barcelona Gallery, centrada en la transformación del sector turístico desde la arquitectura, el diseño y la planificación.

[Puedes ver el video de la jornada “Turismo, arquitectura y diseño en espacios hospitality” aquí].

Es una transformación urgente que ya está en marcha, especialmente en Latinoamérica, donde emerge con fuerza una nueva industria turística con vocación de cambio: modelos más sostenibles, conectados con las comunidades locales, con un riguroso respeto medioambiental y con la gestión del agua y la energía como uno de sus pilares de desarrollo.

Imagen We Are Water

El sector turístico tiene una relación directa con la arquitectura y el diseño.

Como explicó Carlos Garriga, director de la Fundación We Are Water, “uno de nuestros grandes retos es concienciar, cambiar actitudes, promover un cambio radical en el comportamiento respecto al agua y la sostenibilidad”. Esta convicción atraviesa los debates actuales sobre el turismo y su impacto en el territorio, el agua y la vida comunitaria

Junto a Jorge Arditti y Carlos Garriga, los arquitectos Carme Pinós, José Antonio Ares, Stephany Haro e Isabel López Vilalta, conformaron la mesa de debate, con Suzana Gomercic, vicepresidenta de operaciones en Europa de Hilton Grand Vacations y David Cámara, uno de los impulsores de nuestra iniciativa Smart Water, quien ejerció de moderador.

El sector hotelero y el turismo no solo impulsan economías, sino que también configuran identidad, cultura y desarrollo. Los ponentes exploraron la visión compartida entre Latinoamérica y Europa, contrastaron lecciones aprendidas a través de sus proyectos y apuntaron nuevas oportunidades de colaboración entre empresas y profesionales de ambas regiones clave en el mundo.

Imagen We Are Water

Uno de nuestros grandes retos es concienciar, cambiar actitudes, promover un cambio radical en el comportamiento respecto al agua y la sostenibilidad”. Carlos Garriga, director de la Fundación We Are Water.

Arquitectura sostenible con propósito

Jorge Arditti destacó el papel clave del arquitecto en esta nueva etapa: “La arquitectura debe ser biofílica: integrar y fomentar una conexión directa con el agua, la luz y los elementos naturales, como las plantas y los materiales orgánicos”. Y demostró, con su enfoque basado en el respeto por el entorno, cómo el diseño puede ser una herramienta para mejorar la vida de las personas y crear valor local.

Es una visión compartida por la arquitecta española Isabel López Vilalta: “La importancia del arquitecto y diseñador está en que nuestra mirada no está tan ligada al rendimiento económico, lo que nos permite ver los proyectos de forma más holística”.

Stephany Haro reforzó esta conexión entre diseño y comunidad: Los proyectos arquitectónicos son una ventana y una posibilidad de conexión y enriquecimiento con las comunidades y su entorno”. Por su parte, Carme Pinós advirtió que la arquitectura estandarizada e industrializada está perjudicando esta proyección humanística en la hostelería: Tenemos que poner en valor la idea de que crear espacios de bienestar es generar espacios de identidad y de conexión emocional. E insistió en que la arquitectura debe seguir las trazas del territorio donde se aplica, no imposiciones traídas de fuera.

La arquitectura sostenible es uno de los grandes retos del presente. Para Arditti, “los proyectos arquitectónicos actuales deben integrar de manera natural prácticas sostenibles, el bienestar y la economía circular. Pero advierte que no puede haber arquitectura sostenible sin urbanismo sostenible: “El buen urbanismo provoca una actitud positiva en las personas. Es la base del futuro.

En esa misma línea, López Vilalta reivindicó el uso de la artesanía y los materiales locales como forma de sostenibilidad cultural y ambiental: “Actuar de manera responsable también es dar sensación de pertenencia al lugar”.

Imagen We Are Water

Jorge Arditti destacó el papel clave del arquitecto en esta nueva etapa: “La arquitectura debe ser biofílica: integrar y fomentar una conexión directa con el agua, la luz y los elementos naturales, como las plantas y los materiales orgánicos”.

Turismo, agua y bienestar: una relación directa

El turismo es hoy uno de los sectores que más directamente conectan con el diseño, la arquitectura y el medio ambiente. También es uno de los más intensivos en el uso de agua. “Desde las habitaciones hasta los jardines y los campos de golf, el sector turístico tiene un impacto directo sobre el recurso”, explicó Garriga. “Una buena gestión del agua en este ámbito tiene efectos muy significativos, tanto positivos como negativos”.

La industria hotelera, por su visibilidad y escala, puede convertirse en un motor de cambio. Su papel como agente de responsabilidad social va más allá de las infraestructuras: se trata de influir en los millones de personas que la utilizan. Suzana Gomercic se basó en la experiencia de la iniciativa “Hagamos un Trato” con la Fundación, y ahora continuada con las Walkathons, para sintetizar el compromiso que ha asumido la industria hotelera en el mensaje de concienciación: “Hagamos un trato. Pidamos a nuestros clientes que no malgasten el agua, que reutilicen las toallas, que no exijan cambiar las sábanas cada dos días. En casa no lo hacemos. Entonces, ¿por qué deberíamos esperarlo en un hotel?

Imagen We Are Water

Suzana Gomercic se basó en la experiencia de la iniciativa “Hagamos un Trato” con la Fundación, y ahora continuada con las Walkathons, para sintetizar el compromiso que ha asumido la industria hotelera en el mensaje de concienciación.

Identidad local y estándares globales

Una de las grandes tensiones del turismo es encontrar un equilibrio entre la identidad local y los estándares internacionales. David Cámara expuso el trabajo de concienciación realizado desde la Fundación y que ha tomado cuerpo en México, país de contraste y enormes retos: “Tenemos la oportunidad de no cometer los errores que hemos cometido en muchas regiones, incluyendo Europa.

José Antonio Ares lo expresó así: “Recuperar la memoria del lugar y crear un diseño que dialogue con la historia. Cuanto más cercano estás al lugar en materiales, en narrativamenos energía necesitas para crear experiencias potentes.

Haro coincide en este punto: “La arquitectura y el diseño pueden ser embajadores de la cultura. Cada uno plasma su localidad, su individualidad, su ubicación. Eso es lo que enriquece la experiencia del huésped.

La artesanía local y su inclusión en los complejos turísticos juega un papel clave en el respeto y promoción de la identidad y cultura locales. En este sentido, Latinoamérica ofrece una riqueza artesanal única. Pero conectar esa riqueza con el turismo requiere también educación y acompañamiento. “Nos llegan artesanos que no saben ni qué precio poner a sus obras”, explicó Haro. “Desde la hotelería podemos trabajar con ellos, ayudarlos a profesionalizarse, a entender procesos de producción a gran escala, a valorar su trabajo.” El diseño hotelero puede ser ese puente: “La hospitalidad es una ventana. Te permite llegar, disfrutar y acercarte a realidades que antes estaban desconectadas”, afirmó la arquitecta.

Hospitalidad: la arquitectura del bienestar

El concepto de hospitalidad ha trascendido su definición tradicional. “Hoy la hospitalidad se ha expandido a todos los ámbitos donde se desarrolla la vida”, señaló Ares. “El espacio es una abstracción; el lugar es donde ocurre la vida. Y ahí la hospitalidad tiene un papel clave.

David Cámara lo definió como la capacidad de generar bienestar, identidad y experiencias emocionales. “La arquitectura actual diseña espacios que ponen a la persona en el centro. Es tan importante ser amable con el medioambiente como con las personas.

Esta visión humanista del diseño conecta con evidencias científicas sobre el impacto positivo que tienen los espacios bien diseñados en la salud y la cognición. “Ser hospitalarios con el entorno y con la comunidad es parte esencial del trabajo del arquitecto.

Un debate abierto que no debe terminar

Todos los participantes coincidieron en la importancia de que la arquitectura y el diseño generen espacios turísticos que eduquen y permitan entender y valorar correctamente su propio significado.

La jornada en el Roca Barcelona Gallery fue, en este sentido, un espacio de reflexión transversal en la línea de nuestra iniciativa Smart Water con la que hemos celebrado siete debates internacionales. Las voces de la arquitectura y el diseño, entendidos desde la responsabilidad y la conexión con el entorno, son claves para pensar el turismo no solo como una industria, sino como una herramienta de transformación cultural, social y ambiental. Es una evolución imprescindible que ya está en marcha.