Nieve salvadora

En muchas zonas de Rusia, algunos pueblos se han quedado sin agua debido a la destrucción de los acuíferos. Es el caso de una de las 60 familias de Beriózovski que narra el micro documental SNOW, uno de los finalistas del We Art Water Film Festival 4. Para ellos, la nieve es la fuente de agua más segura.

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SNOW de sacha127 (Rusia). Finalista del We Art Water Film Festival 4. Categoría de Micro-documental.

Con más de 31.000 m3 por habitante, Rusia es uno de los 10 países con mayor cantidad de agua renovable del mundo. Sin embargo, la contaminación de ríos y lagos por la falta de depuración de las aguas residuales, los vertidos industriales descontrolados y la destrucción de las aguas subterráneas por sobreexplotación agrícola o minera obligan al país más extenso del planeta a plantearse una nueva cultura del agua, y a invertir enormes recursos financieros para lograr la seguridad hídrica.

El caso de Barzas, un barrio de la ciudad siberiana de Beriózovski en el que viven 60 familias, es un ejemplo. La ciudad dispone de modernas infraestructuras administrativas y comerciales, pero los habitantes de Barzas no disponen de suministro de agua potable. Seis años atrás, en cada casa había un pozo con agua en el patio, pero el agua empezó a desaparecer y en menos de un año cerca las 60 casas del barrio se quedaron sin agua. Aunque no han recibido una explicación oficial, la causa más probable es la explotación minera a cielo abierto próxima al barrio que ha destruido los acuíferos.

A pesar de la gran cantidad de empresas industriales de la zona, ni los propietarios de las minas ni las autoridades locales parecen resolver el problema. Para las familias de Barzas, la obtención de agua potable es una labor cotidiana que implica a todos sus miembros. La que reciben deben filtrarla, dejarla reposar y luego hervir.

En invierno su situación mejora con la nieve: tienen una inagotable fuente de agua. Recogerla y derretirla es una labor diaria que involucra principalmente a los más de 20 niños del barrio.

En todo el mundo existen muchas comunidades que dependen de la nieve y el hielo de las montañas para sobrevivir. Muchas de ellas, como las que viven en las faldas del Himalaya o de los Andes, están amenazadas por el cambio climático que está causando un ascenso de la cota de congelación del agua. El problema puede llegar a las llanuras siberianas donde es muy frecuente que la nieve, contaminada con polvo de carbón procedente de las minas a cielo abierto y de las fábricas, caiga de color negro en muchas zonas. Afortunadamente este no parece ser el caso de los habitantes de Barzas.